118# Gracias Mel

Después de 1309 días como entrenador del Rayo Vallecano, Pepe Mel fue destituido ayer por la directiva del club. Una racha de malos resultados, con un balance nefasto en el presente año 2010, han condenado a un técnico que lo ha dado todo por el Rayo durante estos últimos años. Mel se encontró a un Rayo hundido en la 2ªB y con trabajo y esfuerzo consiguió devolverlo a 2ª. En todo momento ha dejado claro su compromiso y dedicación con el club, y lo que es más importante, su rayismo. Esta mañana decía lo siguiente en rueda de prensa: "Es un poco más doloroso. Han sido tres años en los que uno ha aprendido a entender a este equipo y a querer a su gente. Me habría gustado despedirme del Rayo así, llegar al 30 de junio, aunque en el fuero interno tenía claro que esta era mi último año aquí porque era muy complicado seguir por muchas cosas".

Estas cosas de las que habla me las puedo imaginar. El equipo lleva solo dos temporadas en la división de plata después de su calvario de cuatro años por la 2ªB, y la directiva solo piensa en el ascenso a 1ª. Está bien ser ambicioso, pero también es importante ser realista. Si quieres hacer un equipo competitivo y que dispute el ascenso, debes mantener el bloque y hacer refuerzos acordes a tus objetivos. A principio de temporada, se vendió a Diamé y Amaya al Wigan por cerca de 4 millones de euros y no se renovó a Miguel Albiol, uno de los capitanes del equipo, jugador polivalente de los más utilizados por Mel y que también había demostrado su compromiso con el Rayo durante cinco temporadas. Son solo dos ejemplos de cómo desarmar un equipo, para volver a rearmarlo a base de cesiones y descartes de otros clubes. No es cuestión de dudar ahora de jugadores como Movilla o Ruben Castro, cuya calidad está reconocida, pero son nuevos en el grupo y en conjunto, a pesar de realizar buenos partidos, no se está rindiendo a la altura de un equipo que aspira a jugar en Primera División. A lo mejor la directiva debería plantearse si de verdad hay equipo para luchar por el ascenso.

Está claro que la Segunda División española es una categoría dificilísima. En diciembre, el Rayo estaba cuarto a dos puntos del ascenso y ahora es undécimo a doce del ascenso y siete del descenso. En tres partidos pasas de estar arriba a ver el precipicio. Y puede ser por lo que ha dicho Mel acerca del miedo a volver a descender a 2ªB o puede ser que la directiva y la secretaría técnica se han flipado de verdad con el ascenso, pero yo personalmente no le encuentro mucha lógica a esta destitución. Sólo queda agradecer a Mel su trabajo y desearle suerte donde vaya. Espero volver a verle por Vallekas.

Recomiendo la lectura del siguiente artículo: "Día triste para un rayista" (Rayo Herald).